Guerra entre usuarios y anunciantes. Ad-blockers, «no me gusta» y participación ciudadana.

Según GlobalWebIndex 1 de cada 3 usuarios menor de 35 años usa ad-blockers. Los sistemas de bloqueo de publicidad en Internet indican que los banners son una práctica publicitaria que sigue generando frustración y enfado entre los Internautas. De momento sólo los más jóvenes lo hacen, pero lo normal es que todo el mundo aprenda a hacerlo. Ahora Apple también los acepta en sus dispositivos.

Cuando pruebas estos ad-blockers las páginas cargan rápidamente, no saltan vídeos ni sonidos inesperados… Un mundo maravilloso. Tan mala es la experiencia de la publicidad en Internet que muchas plataformas lo usan como reclamo. Hazte socio y lee sin publicidad.

Foto: zeevveez

Otro susto es el que ha dado Facebook con la idea de un botón de “no me gusta”. Salta la alarma y la red social tiene que relajar a los «anunciantes» explicando que, más que un botón de crítica, servirá para “apoyar” en caso de tragedias o problemas. Es decir, servirá para decir que no nos gusta que aumente el número de refugiados o que nuestro amigo se haya quedado sin trabajo.

Facebook se aprovecha del miedo de las marcas a la interacción de tú a tú con los usuarios para obtener rentabilidad. En contra de toda lógica, alejar a la marca del usuario mediante formatos de publicidad específicos y diferenciados, favorece la inversión. Marcas y agencias a menudos nos sentimos más cómodos como meros «anunciantes» que buscando la gran quimera del engagement.

Más marketing

Pero, ¿Internet no era otra cosa? Pues sí. Parece que pasan los años y pocos son los que le pillan el punto a la interacción y muchos se siguen sintiendo más cómodos en formatos que siguen la lógica de la publicidad tradicional.

En Internet el marketing es la baza ganadora. Estrategias de largo recorrido que buscan la participación del usuario. Esta misma semana hemos hecho una recopilación de campañas de social media que saben construir comunidades y aprovechar las ventajas de las redes sociales.

Otro gran ejemplo es el de la web de participación ciudadana del Ayuntamiento de Madrid. Uno de los proyectos de comunicación política más interesantes que recuerdo. Si somos capaces de quitarnos las gafas partidistas, vemos una iniciativa que sabe sacar partido al medio y es capaz de ser útil y significativa para el usuario. Los números hablan por sí mismos: 1.400 propuestas y 22.100 comentarios en tres días.

En la red es fundamental trazar objetivos a largo plazo y trabajar en ellos a diario. Los grandes impactos en campañas esporádicas tienen que verse como un complemento a esta otra comunicación orgánica.

Para esto hay que abrazar el cambio y…

1. En vez de impacto, generar interés.
2. En vez de reclamar atención, estar ahí cuando nos necesitan.
3. En vez de discursos cerrados, dar un papel protagonista al usuario.
4. En vez de «poner esto en Internet», jugar con el propio medio.
5. En vez de pensar tanto qué decimos, saber qué dicen de nosotros.

Es evidente que no me estoy inventando nada porque esto ya se ha dicho una y otra vez. Pero seguramente, si estuviese más presente, no asustaría tanto que se bloquee la publicidad o el cambio de un botón de Facebook.

Marcos Gómez Piñeiro

Analista de datos digitales especializado en social media en RTVE. Co-fundador de Concepto 05. Profesor de análisis y estrategia digital en  Instituto Europeo de Diseño y EOI.