“¿Lleva gafas? ¿Usa sombrero? ¿Será chica o chico? Seguro que es chica…”. Como si del mítico juego de mesa de MB se tratara, muchas son las preguntas que nos hacemos para descubrir quién es, cuáles son las características, los roles y funciones, las condiciones de trabajo de una de las figuras emergentes del social media, el/la Community Manager. ¿Monitoriza las opiniones sobre las marcas? ¿Genera contenidos de calidad? ¿Dinamiza la comunidad en busca del tan ansiado “engagement”? ¿Realiza seguimientos exhaustivos de nuestras campañas en la red? ¿Tiene el don de la ubicuidad y la omnisciencia trabajando con cada departamento de la empresa?
Aunque conocemos la importancia del Community Manager para gestionar nuestra imagen y conversar con las comunidades en la red, lo cierto es que aún no disponemos de demasiados datos sobre qué está sucediendo con esta figura. Elaborado por Jason Keath para Social Fresh, el informe “The 2012 Community Manager Report” sobre una muestra de más de 300 CMs, localizados principalmente en grandes ciudades de Estados Unidos, nos ofrece algunas pistas:
Parece que la mayoría de las empresas y marcas aún están experimentando en social media, dedicando tan sólo parte de su tiempo a la gestión de comunidades a través de la contratación de profesionales muy jóvenes. Sería interesante disponer de información detallada sobre qué está ocurriendo con esta figura profesional en España para poder extraer conclusiones, en todo caso, el rol del CM evoluciona y está madurando en el sector, cada vez más valorado y demostrando su importancia para gestionar nuestra imagen y reputación en la red.
El/la Community Manager ha desembarcado, ya están entre nosotros, ¿o acaso no te has cruzado con alguno/a en el ascensor? 😉