Luces y sombras del Big Data - CONCEPTO 05
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Luces y sombras del Big Data

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Todo apunta a que 2015 será el año del Big Data y el Social Business Intelligence. Dos conceptos muy relacionados que nos hablan de la gestión y el análisis de grandes volúmenes de datos para mejorar la relación entre las empresas y sus clientes.

Social Business Intelligence: El arte de escuchar

Cada día se suben a Facebook 250 millones de fotos y, en Twitter, se publican 400 millones de tweets. Cada minuto se suben 100 horas de vídeo a YouTube… A lo que hay que añadir las millones de publicaciones en blogs y foros en todo el mundo.

El Social Business Intelligence consiste en escuchar toda esta información que hay en la red para ordenarla, analizarla y tomar decisiones eficaces. Diseñar nuevos productos y servicios y mejorar la comunicación resolviendo necesidades reales y concretas.

Desde la aparición de Internet la comunicación de las personas y las empresas ha ido cambiando significativamente hasta la gran explosión de las redes sociales en 2009. Cada persona se ha convertido en un pequeño medio de comunicación y la opinión de los usuarios tiene ya más credibilidad que cualquier medio tradicional.

La primera parte, la de estar presente en estos medios y crear mensajes la mayoría de empresas e instituciones ya la hemos entendido. La segunda fase, muchas también, leer los comentarios y responder a sugerencias, críticas o dudas. Ahora viene el siguiente paso: que la organización en conjunto sea capaz de escuchar y adaptarse cada día a lo que la sociedad desea.

Google, el nuevo Gran Hermano

Para que las empresas tengamos acceso a grandes volúmenes de datos es necesario el almacenamiento de información por parte de buscadores, redes sociales, sistemas operativos, etc. En el programa Carne Cruda entrevistaban recientemente a Julian Assange, el fundador de WikiLeaks. En este podcast podéis escuchar su análisis sobre este mismo asunto desde un ángulo que el mundo empresarial pocas veces analiza.

Más allá del uso que las marcas hacen de los datos, Assange, habla del peligro que supone para los cuidadanos que empresas como Google tengan tantísima información sobre nosotros. Recordemos que acceden a los correos que enviamos desde Gmail, nuestro smartphone de Android indica en todo momento nuestra localización, sabe las páginas que hemos visitado y un largo etcétera.

Los cambios en Internet son muy rápidos y es fundamental que analicemos las cuestiones éticas que suponen la acumulación de estos datos.

 

Democratizar el Big Data

Da bastante pánico la idea de que unos pocos monopolios puedan tener el control de una información tan sensible. De ahí que sea fundamental que sepamos qué información tienen de nosotros, que podamos limitarla y que estemos al tanto de los acuerdos que se puedan producir entre los gobiernos y estas empresas. Tragedias como la del Charlie Hebdo suelen venir acompañadas de medidas que facilitan a los gobiernos el acceso a nuestros datos.

Gracias al Big Data empresas como Google ya ofrecen un sinfín de estadísticas sobre consultas de búsqueda a las que podemos acceder de forma gratuita y los servicios de publicidad en redes como Facebook y Twitter permiten una publicidad ultrasegmentada. Hoy en día el acceso a esta información y la capacidad de análisis de los datos será lo marque las diferencias entre unas empresas y otras.

Quizás uno de los grandes retos que tenemos por delante es conseguir que los datos retornen a la sociedad como un bien común. Parece fundamental distinguir entre la cara y la cruz del Big Data. Cómo avanzar en la parte positiva es algo que llevamos tiempo pensando en Concepto05, algunos de los caminos pueden ser:

  • Investigaciones participativas y producidas por diferentes agentes (usuarios, cooperativas, asociaciones sectoriales, instituciones, etc.)
  • Desarrollo de herramientas de análisis en software libre.
  • Publicación de estudios bajo licencia creative commons.
  • Fomentar el slow marketing o una comunicación más ética y sostenible.
  • Defender los derechos de los usuarios y la neutralidad de la red.

Estos pasos parecen fundamentales para evitar el peor escenario, el de un Gran Hermano en el que grandes monopolios dispongan de toda la información de las personas y se cree una brecha cada vez mayor entre transnacionales y pequeñas empresas.

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